El museo brinda una visión completa de la vida cotidiana en Málaga y su provincia desde la elegancia burguesa hasta la sencillez rural pasando por lo oficios artesanales que sustentaban la economía local.

Al adentrarnos en el museo, en la planta baja, nos encontramos con diferentes espacios que nos sirve a modo de transición de dos áreas distintas: la vida rural y los obradores artesanales. Esta última está centrada en mostrarnos la relación entre el hombre y el mundo laboral y su importancia en la producción de bienes esenciales como la alimentación u objetos de uso cotidiano.

Ya en la planta superior ingresamos en el refinado mundo de la burguesía del siglo XIX a través de la exploración de sus actividades económicas, sociales y culturales. Todo un contraste entre la opulencia de la burguesa y la sencillez de la vida rural.