Fundación Unicaja ha presentado este jueves, 9 de julio, la exposición, ‘Otros tiempos…’, del fotoperiodista Pabló Juliá (Cádiz, 1949), que fue testigo de uno de los momentos políticos más importantes de la reciente historia de Andalucía: la Transición a la Democracia. La exposición cuenta con el patrocinio de la Fundación Unicaja, junto a la Diputación de Jaén y el apoyo de la Fundación Felipe González, la Diputación de Cádiz y la Consejería de Presidencia, Administración Pública e Interior de la Junta de Andalucía, a través del Centro de Estudios Andaluces.
La muestra se puede visitar en la sala de exposiciones temporales del Centro Cultural Baños Árabes (Palacio de Villardompardo) hasta finales de septiembre de 2020, está promovida por el Foro de los Consejos Sociales de las 9 universidades públicas andaluzas, y se ha presentado hoy con la presencia de Carmen Espín, presidenta de la Fundación Unicaja Jaén; Francisco Martínez, presidente de la Diputación de Jaén; Francisco Vañó, presidente del Consejo Social de la Universidad de Jaén; y el propio autor, Pablo Juliá.
Pablo Juliá presenció algunos los hechos más relevantes de este apasionado periodo de la historia de nuestro país, que inició la transformación de una Andalucía que abandonaba la penumbra franquista y miraba al futuro con optimismo.
A través de casi un centenar de fotografías, la exposición Otros tiempos… recorre algunos de los hechos históricos más destacados de la Transición en Andalucía, como el 4 de diciembre de 1977, el Día de Andalucía, el Pacto de Antequera y el referéndum del 28-F. La exposición se detiene, también, en mostrarnos cómo era Andalucía en la década de los setenta y principios del ochenta, con imágenes sociales muy impactantes, con personajes que marcaron una época en nuestra Comunidad y donde no falta la fuerte presencia de la cultura, de la lucha social y de la presión política para erradicar el franquismo.
Carmen Espín, presidenta de la Fundación Unicaja en Jaén, resaltó que la la exposición sitúa al visitante “en los años de la transición y recoge grandes momentos de nuestra historia”. “Juliá capta a través de su objetivo momentos tan claves como la firma del Pacto de Antequera, el primer 28 de febrero, donde los andaluces afianzamos nuestra autonomía, y un largo etc”, explicó.
“Los momentos históricos vividos en primera persona por este gran artista, junto a la belleza de su fotografía, suponen un magnífico documento de recuerdo para los que los vivimos y un descubrimiento para todos los jóvenes ávidos de conocer nuestra historia”, finalizó Espín.
Pablo Juliá comenzó haciendo fotografías con una Yashica que le dejó un cura en el colegio. Autodidacta, militó en la clandestinidad durante el franquismo, colaborando en el periódico El Socialista. Después pasó a El País, del que participó en el equipo inicial y donde organizó su delegación en Andalucía en 1983, no separándose ya sus caminos hasta 2007. Fue director del Centro Andaluz de la Fotografía (CAF) desde 2007 hasta 2016.